Después de clasificarse a octavos de final como uno de los cuatro mejores terceros, Panamá parece tener poco que perder y mucho que ganar en el mano a mano con los mexicanos.
México lideró su grupo al ganar sus tres compromisos: por 3-1 a Corea del Norte, por 2-1 al Congo y por 3-2 a Holanda.
El Tri tuvo la segunda mejor producción ofensiva del torneo en la primera fase.
Sin embargo, su línea defensiva parece distraída. Encajó cuatro goles y es un asunto que preocupa a los mexicanos y alienta a los panameños.
Los de Jorge Dely Valdés, en cambio, han carecido de gol, apenas suman los dos de Jorman Aguilar y, como si fuera poco, tienen castigado a su cañonero, Omar Brown. A favor tienen su acople en defensa para resistir la presión y su rápida salida al contragolpe.
Las selecciones sub'17 de México y Panamá nunca se han enfrentado en un Mundial.
En caso de empate en el tiempo reglamentario, no habrá tiempos extras y el vencedor tendrá que superar una tanda de penaltis.
El ganador de esta llave tendrá como rival en los cuartos de final al ganador del partido entre Francia y Costa de Marfil, también este jueves en el estadio de Querétaro.
Francia, con su seleccionador Patrick Gonfalone, terminó en segundo lugar en su grupo, debajo de Japón, que con su liderato trastocó la llave en la que Argentina pasó de favorito a un simple actor de reparto, ya que apenas pudo clasificarse como tercero.
Costa de Marfil, fue el rival más duro de Brasil en la primera fase. El choque terminó 3-3 y ha llegado a los octavos de final de la mano o, mejor, de las botas de su goleador, Suleymane Coulibaly, autor de ocho celebraciones en tres partidos.
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