Noche mágica la del domingo en el Teatro Morelos. Los “Niños Cantores de Viena” recibieron el reconocimiento y el cariño del público moreliano.
Dentro de su gira de conciertos “Sudamérica 2011” el presentado en Morelia cobró un significado especial, pues es el único, en el que compartieron escenario. Los Niños Cantores de Morelia, del Conservatorio de las Rosas, abrieron el concierto con una serie de piezas mexicanas que incluyó entre otras “Mi Ciudad” y “El Cascabel”, después de la ovación del público subió al escenario el coro vienés abriendo la presentación con un fragmento de Carmina Burana. A partir de ese momento el público recorrió a través de la música épocas y culturas diversas.
De Vivaldi a los Beatles; de las polcas y valses vieneses al “Money, Money” de Abba. De música sacra a cánticos musulmanes y mantras. Todo, en un espacio donde las voces, un piano y eventualmente un poco de percusiones, recreaban y confirmaban la universalidad de la música.
El final fue una sorpresa para los asistentes. El Coro de Viena y el Moreliano se unieron para entonar el Aleluya de Bernal Jiménez dirigido por Elizabeth Espejel, la Directora Artística de los Niños Cantores de Morelia. Al terminar la pieza. Los Niños Cantores de Viena salieron del escenario para regresar inmediatamente portando unos sombreros mexicanos, maracas y un entusiasmo especial cuando su Director, Florian Schwartz dirigió a ambos coros con una peculiar versión de “La Cucaracha”.
Con el cierre de un “Olé” conjunto, ambos coros se despidieron de su público, el cuál emocionado los despidió con una emotiva ovación de pié.
Nuevamente se comprueba la universalidad de la música como idioma, entre los coros vienés y moreliano prevaleció la alegría y el entusiasmo que su juventud y amor por la música convirtió en una conversación coral más alla de cualquier frontera.
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