La pasión y el orgullo de una Ciudad estaban en disputa, Atlas y Chivas saltaron a la cancha eliminados del Apertura 2015, pero con el compromiso de entregarse en un partido al que poco le importan los escenarios. El Clásico Tapatío buscaba una nueva historia digna de recordarse.
Los nervios y las precauciones fueron las primeras en manifestarse, poca profundidad y mucho tránsito de balón se dio en los 15 minutos iniciales, hasta que Chivas se ánimo a ir a frente y abrir la defensa con tiros de larga distancia, los cuales se fueron desviados.
Miguel Fraga fue el primero en levantar la mano como héroe del Clásico Tapatío al taparle dos disparos a Marco Fabián, el primero ganándole un mano a mano dentro del área chica; y la segunda con un enorme lance a un tiro de castigo del número 33 que coqueteó con entrar pegado al poste.
Por su parte Atlas buscó la velocidad y el contragolpe como principal arma y Carlos Arreola lo dejó en claro al conducir de lado a lado de la cancha, desparramando rivales y cruzar de más un disparo.
Omar Bravo tuvo una nueva para el Rebaño, cuando en un mal despeje quedó sólo por a banda derecha, recibió un pase filtrado de Isaac Brizuela, para sacar un disparo que se fue ligeramente desviado.
Para finalizar la primera mitad, Franco Arizala condujo el esférico, recortó a un rival y sacó un zurdazo que Antonio Rodríguez desvió de gran forma para mantener el 0-0.
En la segunda mitad Atlas se fue al frente y por medio de Gonzalo Bergessio tuvieron las mayores oportunidades, primero con un tiro cruzado y otro a primer poste que desvió de gran manera Toño Rodríguez para levantar la mano como figura del encuentro.
A partir del minuto 60, el balón le perteneció a Chivas que de a poco metió al área al conjunto local. El primer aviso del segundo tiempo llegó un con un disparo de volea que Carlos Fierro mandó por encima.
Luego de sus dos disparos en la primera mitad, Marco Fabián por fin tuvo una nueva oportunidad de frente a la puerta y fue por medio de un balón parado, el cual cobró de parte interna y con un toque sutil envió el balón al fondo de las redes, superando el lance de Miguel Fraga.
Con más fuerza que claridad futbolística, los Rojinegros buscaron el empate, pero sin encontrar la profundidad necesaria, incluida la última jugada donde tres disparos consecutivos no encontraron la puerta de Rodríguez.
De esta forma Guadalajara se adjudicó un nuevo Clásico Tapatío, alargando a cuatro su racha de partidos sin perder ante el acérrimo rival de la Perla de Occidente. Con los tres puntos los de Matías Almeyda llegaron a 21 unidades y ocupan la décimo segunda posición en la tabla general; mientras Atlas se queda con 17 en el sitio 14.
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