Los Tigres dominaron ampliamente el encuentro. Los regiomontanos buscaban meterse a la Fiesta Grande de cualquier manera. Los puntos estaban contados para poder ingresar a esta instancia.
La labor de la ofensiva de los felinos fue impecable. Javier Aquino, Ismael Sosa, Eduardo Vargas y André Pierre Gignac se vieron imponentes.
A pesar de la supremacía norteña, Pumas hizo una llegada importante, pero la gran colocación de Juninho fue factor para que con un cabezazo evitara un gol cantado.
El primer tiempo se diluyó sin muchas oportunidades para el cuadro dirigido por Francisco Palencia.
En la segunda mitad, Tigres no suavizó su rendimiento. En el medio tiempo Ricardo Ferretti hizo un cambio que valdría oro; sacó a Jesús Dueñas para darle minutos a Jürguen Damm.
El joven volante fue factor; logró anotar tras una gran asistencia de Eduardo Vargas en las inmediaciones del área. El dorsal número 25 definió de forma perfecta cruzando a Alfredo Saldívar.
El cambio de “Tuca” repercutió mucho en el marcador. Damm no paraba con su velocidad y definición; volvió a anotar unos minutos después, se llevó al arquero capitalino para meter la bola al arco y hacer explotar de nueva cuenta al Universitario.
La feria de goles no acabaría ahí. André Pierre Gignac se hizo presente en el marcador. El francés hizo un potente disparo que fue imposible para el cancerbero. La goleada auriazul causaba la euforia en San Nicolás y la esperanza seguía viva.
Tigres sigue por el sueño de calificar a la Fiesta Grande; se coloca momentáneamente en el octavo puesto con 19; Pumas está en onceavo con 18.
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