lunes, 30 de enero de 2012

EL TÉCNICO MAS VALIENTE

LOS ÁNGELES, California -- Me quedo esta mañana con una frase del profesor Héctor Hugo Eugui, buen hombre, gran profesional y también --llamémosle-- un osado entrenador de futbol que a esta hora del día ya debe estar dirigiendo su primer entrenamiento con Estudiantes=Tecos.

"Mi madre me decía que los grandes guerreros no son los que ganan siempre. Los grandes guerreros son aquellos que van a la batalla sin miedo".

La aportación del profesor Eugui parece servir perfectamente bien para analizar los nuevos tiempos que vive el futbol mexicano en cuanto a la contratación y al contrato mismo de los técnicos de futbol.

Ocurrió hace algunos meses cuando los periodistas le preguntaban con insistencia a Yon de Luisa y
a Ricardo Peláez si el trato con Miguel Herrera era realmente tan corto. Pasó también en la semana con Ignacio Ambriz: "Me dieron seis meses para sacar esto adelante. Después, nos sentáremos a visualizar el futuro". Y ocurre hoy, con un hombre como Eugui, quien acepta a un equipo que parece condenado al fracaso en un trabajo que podría durar tan sólo unos cuantos meses.

Las reglas del juego han cambiado. Los contratos a largo plazo, garantizados y por ende con muchos ceros a la derecha no existen más. Los equipos grandes, chicos e incluso medianos están firmando técnicos con base a los resultados y los entrenadores, la mayor parte de ellos, admiten las reformadas condiciones del negocio. A destajo, ganas por lo que haces y punto, ese parece ser el mensaje.

Pero éste fenómeno no viene solo. También llega fortalecido cada día mas con la presencia de directores deportivos, de directivos que sin ser entrenadores, cuentan con la experiencia de la cancha y la aplican directamente al servicio del club. Las decisiones deportivas más importantes ya no están en manos de ejecutivos o de administradores. Las decisiones deportivas en los clubes son tomadas directamente por dirigentes ex jugadores (Luis Miguel Salvador, Ignacio Palou, Ricardo Peláez, Alberto Quintano y otros más).

Hoy, se juega contra el tiempo, se juega a ganar y/ o a buscar otro remedio. Los técnicos, en efecto, como lo hace Eugui y como lo relata la señora madre del profesor Eugui, los entrenadores tienen que ir a la batalla sin miedo.

Por David Faitelson

Las reglas del juego han cambiado. Los contratos a largo plazo, garantizados y por ende con muchos ceros a la derecha no existen más. Los equipos grandes, chicos e incluso medianos están firmando técnicos con base a los resultados y los entrenadores, la mayor parte de ellos, admiten las reformadas condiciones del negocio. A corto plazo, a destajo, ganas por lo que haces y punto, ese parece ser el mensaje.

No hay comentarios:

Publicar un comentario